Como si estuviera anunciado

febrero 23, 2012 minerva 11 Comments

Rescaté de las sombras

un trozo de mi.

Extrañado preguntaste

por qué no olía tu mañana

a café.

Seguí contemplando,

distraída,

ese cielo que pugnaba

por mantenerse azul.

El silencio,

espeso,

manejaba el aire,

escondía rutinas.

Cerraste la puerta,

ausente.

No detuve tus pasos,

tampoco

volví a verte.

11 Miradas al Sur:

No hay que ser muy avispada para verlo.....

febrero 21, 2012 minerva 12 Comments

Hoy, al leer los comentarios y repasar un largo rato mis escritos, he caído en la cuenta de que tal vez esté "demasiado" trágica, que parezca triste y desconsolada ante vuestros ojos, llorona y quejica hasta el empacho....lo cierto es que no estoy pasando por mi mejor época, todo sea dicho, pero con independencia de ello debo reconocer que soy así...descargo aquí todo cuanto acumulo y no cuento, es mi terapia personal ante lo que no puedo gritar, ante lo que no puedo llorar, ante lo que no puedo cambiar.

Quien me conoce personalmente sabe que, salvo momentos de melancolía, soy bastante risueña, positiva y hasta divertida, tímida si pero cuando venzo esa barrera me doy por completo y sin muchas reservas.

Siento que mi cara oculta no brille mas, procuraré plagar de sonrisas este lugar, os aseguro que estoy en ello....

12 Miradas al Sur:

A palabras necias....

febrero 20, 2012 minerva 6 Comments

Piensas demasiado a menudo que no merecías cuanto de dañino te estaba sucediendo…, yo creo que sí, claro que hay circunstancias externas que influyeron pero, básicamente, eras tu quien actuaba para bien o para mal conforme a un criterio que pensabas ciegamente adecuado.

Te negabas a creer que esto era así, desgraciadamente no hay “mano negra” en nada de lo que sucedió, si dejaste que te hundieran ciertas cosas es porque no prestaste atención a las señales que de forma inequívoca te estaban alterando, no supiste canalizar las emociones, no quisiste escuchar con serenidad, dejándote arrastrar sin cortar amarras.

Y no, ya sé que no es tristeza lo que recorre tu interior, es rabia ante la realidad, impotencia si se quiere ante el tiempo perdido porque, en el fondo, tenías muy claro que sucedería tal y como hoy se ve, sin tiritas ni vendas que taponen las heridas.

Cicatrizarán, no te preocupes por ello, pero escoge ya, superar el miedo a saltar al vacío o quedarte contemplando, quejándote, sufriendo…tu verás, yo no puedo ayudarte.

6 Miradas al Sur:

Sin mas

febrero 15, 2012 minerva 10 Comments

Después de tanto tiempo

no hay derrota que se aprecie,

no hay escombros

salvo un vaso hecho añicos

que perdura arrinconado,

recordando.

El asedio tocó ya retirada,

las tropas castigadas del esfuerzo,

buscaron refugio,

e ignorantes, ciegas de confianza,

encontraron traiciones.

Y no hay mas…salvo el invierno

letargo de emociones y desvaríos,

leve instante aferrado a la vida,

defraudado y roto,

helado, sombrío.

10 Miradas al Sur:

Apuntes

febrero 08, 2012 minerva 6 Comments

De repente

me vi envuelta en una densa

tela de araña.

Asfixiada,

ahogada,

sin espacio,

sin eco,

presionando mi piel,

rasgando,

filosas agujas invisibles

descendían,

suspendida en el aire.

Sin equilibrio,

sin movimiento.

De repente

se deshicieron los nudos

cayendo gruesos al vacío,

convertidos en polvo.

6 Miradas al Sur:

Si acaso...Wislawa Szymborska (1923-2012)

febrero 01, 2012 minerva 10 Comments

Podía ocurrir.
Tenía que ocurrir.
Ocurrió antes. Después.
Más cerca. Más lejos.
Ocurrió; no a ti.

Te salvaste porque fuiste el primero.
Te salvaste porque fuiste el último.
Porque estabas solo. Porque la gente.
Porque a la izquierda. Porque a la derecha.
Porque llovía. Porque había sombra.
Porque hacía sol.

Por fortuna había allí un bosque.
Por fortuna no había árboles.
Por fortuna una vía, un gancho, una viga, un freno,
un marco, una curva, un milímetro, un segundo.
Por fortuna una cuchilla nadaba en el agua.

Debido a, ya que, y en cambio, a pesar de.
Qué hubiera ocurrido si la mano, el pie,
a un paso, por un pelo,
por casualidad,
¡Ah, estás? ¿Directamente de un momento todavía entreabierto?
¿La red tenía un solo punto, y tú a través de ese punto?
No dejo de asombrarme, de quedarme sin habla.
Escucha
cuán rápido me late tu corazón.

De "Si acaso" 1978
Versión de Abel A. Murcia

10 Miradas al Sur: